Susana
González G. | domingo, 18 sep 2016
Ciudad de México. La devaluación de 12 por
ciento que ha acumulado el peso frente al dólar durante el último año ha
provocado el encarecimiento de ciertas materias primas y alimentos básicos en
México, advirtió el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).
“El precio de mercado de maíz blanco subió 18.4
por ciento en el año y el del amarillo 12.4 por ciento (aunque este último bajó
1.2 por ciento a nivel internacional)”, precisó. El azúcar se encareció 53.2
por ciento y la soya 18 por ciento, al tiempo que otros productos también han
subido de precio pero en menor medida .
Por otro lado, la firma advirtió que por
cuestiones estacionales en este mes el jitomate saladet y el aguacate
aumentaron de precio en este mes. Datos de la Procuraduría Federal del
Consumidor (Profeco) indican que el jitomate alcanza precios máximos de 38
pesos por kilo en las tiendas de autoservicio y el aguacate de hasta de 62
pesos.
GCMA atribuyó el nuevo aumento del jitomate
saladet a que decreció su disponibilidad en el mercado porque las lluvias
siguen afectando las plantaciones a cambio abierto del fruto, aunque en las
centrales de abasto todavía se cotizaba a 10 pesos y a los productores se les
pagó a 5.5 pesos por kilo al comenzar el mes.
El aguacate se vendía a 46 pesos por kilo en los
supermercados hasta el 9 de septiembre, lo que implica que en una semana subió
16 pesos o 34.7 por ciento. En este caso , la firma consideró que la cantidad
recolectada de aguacate “no ha sido suficiente para atender holgadamente las
necesidades de los compradores, tanto nacionales como del mercado exterior”.
El análisis más reciente GCMA, correspondiente a
la semana pasada, destaca que, en promedio, la tortilla que se vende en las
tortillerías tradicionales ha subido de precio 4 por ciento en un año (y 0.6
por ciento la que se comercializa en supermercados), el bolillo 1.3 por ciento,
el azúcar 42.1 por ciento, el frijol 27.7 por ciento, los aceites y las grasas
9 por ciento, la sal 5 por ciento, las galletas 3 por ciento, la cerveza 2.1
por ciento, la avena 0.2 por ciento, la leche pasteurizada 2.5 por ciento y la
condensada 2.9 por ciento.
También subió el jamón en 7.8 por ciento, las
salchichas 5.8 por ciento, el tocino 23.2 por ciento, la carne de cerdo 3 por
ciento, las frutas 12.3 por ciento y las hortalizas 1.8 por ciento.
No obstante, también hay productos que han bajado
de precio: el huevo lo hizo en 15.3 por ciento, el arroz en 7.6 por ciento, el
café 11.4 por ciento, el refresco 1.2 por ciento, la harina de maíz 0.5 por
ciento, la harina de trigo 5.4 por ciento, el pan de caja 2.7 por ciento, la
leche pasteurizada 2.5 por ciento, carne de res 2,7 por ciento y la carne de
pollo 5.6 por ciento.
El 8 de septiembre pasado, la Organización de las
Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), advirtió que “las
tendencias de los precios de los alimentos retoman su camino ascendente” ya que
en agosto alcanzaron su nivel más alto de los últimos 15 meses, es decir desde
mayo de 2015.
El mes pasado los alimentos se encarecieron 7 por
ciento a nivel internacional respecto a agosto de 2015 y 1.9 por ciento en
comparación con julio. Ello a pesar de que bajaron los precios de los
principales cereales que se producen y consumen en el mundo, es decir, maíz,
trigo y arroz, y a los pronósticos de la FAO y los principales países
productores de que para lo que resta del año y en 2017 mejorarán los niveles de
producción.
GCMA, especializada en analizar el comportamiento
de los mercados agrícolas, hizo notar que si bien a nivel internacional los
precios de algunos productos continúan descendiendo no ocurre lo mismo en
México.
Así, por ejemplo, señaló que en el año el precio
del maíz amarillo bajó 1.2 por ciento, pero en México subió 12.4 por ciento o
el trigo suave se abarató 15.3 por ciento en el mundo, pero subió 3.5 por ciento
en el país. Hay otros productos cuyo precio no se ha reducido en la misma
proporción que en el mercado internacional. El llamado trigo duro cuesta 22.5
por ciento más barato que hace un año en el planeta pero en México sólo se
abarató 9.7 por ciento.
“Mucho del incremento de las materias primas es
por la devaluación del tipo de cambio que al 30 de agosto del año pasado era de
16.50 pesos por dólar y para agosto de 2016 fue de 18.47”, indicó Juan Carlos
Anaya, director de GCMA.
Son aumentos en promedio porque los precios de un
mismo producto como el azúcar o el frijol varían mucho dependiendo de su
origen, tipo o marca. Así, un kilo de frijol negro importado se incrementó de
precio sólo 18.9 por ciento y se vende al mayoreo a 22 pesos en la Central de Abastos,
pero el pinto nacional acumula un incremento anual de 81.8 por ciento y el
pinto de Chihuahua de 91.4 por ciento aunque se venden al mayoreo a 20 y 15.50
pesos, respectivamente.
A su vez, el azúcar internacional denominada C11
se encareció 112.9 por ciento y el kilo al mayoreo se cotiza a 8.26 pesos, pero
la refinada se vende en supermercados a 19.98 pesos y el incremento es de 30.3
por ciento.
http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2016/09/18/devaluacion-de-peso-encarece-alimentos-basicos-en-mexico-consultoria