William Chacón Vie, 07/28/2017
La Red de Mercados Públicos de Tuxtla Gutiérrez
invitó a la población en general a celebrar en cada centro de abasto de la
ciudad el Día del Locatario el próximo 2 de agosto.
Los comerciantes dieron a conocer que la
celebración se realizará en los 15 mercados públicos municipales: Juan Sabines,
Rafael Pascacio, 20 de Noviembre, 5 de Mayo, San Juan, De los Ancianos, entre
otros.
La secretaria general del mercado Juan Sabines,
Isabel Nangusé Tondopó, dijo que habrá música en vivo, mariachis y los giros de
pozol, carne, vísceras de res, camarón y botanas para los visitantes, mismo que
será auspiciado por locatarios y patrocinadores.
La idea es también promover el consumo en los
mercados públicos para fortalecer la económica local y que estos centros de
abasto no desaparezcan, ya que son muchas familias las que trabajan y generan
cientos de empleos.
A PARTIR DE LAS 9:00 HORAS
Esther Díaz López, locataria del mercado San
Juan, reiteró la invitación a la población a que visiten los mercados, y en
especial el 2 de agosto que estarán de manteles largos.
“Que la ciudadanía apoye a levantar la economía
local, que sus productos básicos, frutas, verduras, carnes y demás, los compren
en el mercado público más cercano, no en un centro comercial”, dijo.
Indicó que el mercado San Juan cuenta con más de
44 giros, con garantía de seguridad e higiene.
Mencionaron que el Ayuntamiento todavía no les ha
informado si colaborará con el festejo que realizarán, lo sabrán dos días
antes, pero esperan que por ser su día ayude con algo.
Destacaron que durante cinco años no se celebró
el Día del Locatario, este 2017 sería el segundo año consecutivo que se retoma
el festejo.
LUZ, 23 AÑOS DE LOCATARIA
La señora Luz del Carmen Chanona Torres es
locataria del mercado San Juan en el giro de venta de ropa desde hace 23 años,
y aunque se dicen fáciles, ha superado toda clase de obstáculos, al ser
originaria de Berriozábal y quedar viuda hace 20 años con tres hijos.
Actualmente trabaja con una de sus hijas, con
quien viaja todos los días desde Berriozábal desde muy temprano. Pagan más de
80 pesos en pasajes diario.
Cuenta que antes de comenzar a comerciar en ese
mercado, vendía en la 1ª Poniente y 6ª Sur, lo que se conocía como el mercado
De los Ancianos. De ahí levantaron y reubicaron a 200 comerciantes en el
mercado San Juan.
Cuando llegaron el mercado era pequeño, casi no
llegaban clientes y las ventas eran muy bajas. Fue entonces que optaron por
organizarse y “levantar” el mercado, promoverlo entre los vecinos de la zona,
con sus conocidos, amigos y familiares, y lo lograron.
Sin embargo, de los 200 comerciantes que fueron
reubicados en ese entonces, sólo doña Luz permaneció en el mercado. La
desesperación por las bajas ventas los hizo buscar otros horizontes, pero la
esperanza y paciencia no abandonaron a doña Luz.
Platica que el mercado San Juan tiene 37 años de
fundación, en sus inicios era muy pequeño y fue creciendo poco a poco, incluso
actualmente está en remodelación.
Sobre su mercancía, comenta que viaja a Puebla y
a la Mesilla cada dos o tres meses dependiendo las ventas y temporadas.
En el Mesilla invierte alrededor de 5 mil pesos
en cada viaje, mientras que en Puebla hasta 15 mil pesos, ya que por la
distancia debe comprar más.
EL BENEFICIO ES MUTUO
Gracias a su negocio ha logrado sacar adelante
sola a sus tres hijos, después de enviudar hace 20 años.
“Abrimos un hoyito y tapamos otro, vamos prestando,
porque ahí nos vivimos de préstamos. Así he luchado por mis hijos, de 37, 35 y
30, a los 3 los saque adelante”, dice doña Luz con una sonrisa.
Cuenta también, que se levanta a las 4 de la
mañana todos los días. Sale de Berriozábal a las 5 y llega a las 6 al mercado.
En la tarde, terminan a las 5 y llegan a su casa alrededor de las 7:30, a
comer, porque para ahorrar prefieren no comer en la calle. “Así es todos los
días, no hay días de paseo o fiesta. El mercado es nuestra casa, ahí vivimos”.
Sin borrar la sonrisa de su rostro, dice que
afortunadamente la situación fue cambiando de cuando inició en el Mercado.
Ahora hay temporadas buenas y malas, siempre “Dios no nos deja sin comer, sí
sale pa´la comidita”, para los pasajes, para ir pagando”.
Gracias a su local ha superado varias crisis,
haciendo uso de varios recursos como los préstamos, con la fortuna de que las
ventas nunca se entienden por largas temporadas.
Con la celebración del Día del Locatario se
siente contenta, con la esperanza de que la autoridad apoye a los
mercados, porque en años anteriores este día ha pasado desapercibido, las
autoridades no proporcionaron nada para realizar un festejo.